martes, 15 de enero de 2008

Le declaro la guerra a..


Laura!
Joder, joder cuantas desvariaciones hoy, día de examen.
De esas veces que te das cuenta de que madurar queda muy lejos, y que lo divertido es corretear de un lado para otro, ultimar las ultimas chuletas, entonar algún que otro grito algo desagradable, que ahuyenta a la población infantil de mi querido y venerado instituto de enseñanza pública, del cual hablaré hoy, debido a la GÜASA que tiene Anna. En él, el día a día es más que un simple paso de las horas. Es una continua luchador la supervivencia.
Los bocatas de carne se acaban, los paquetes de patatas vuelan, los polos en verano se descongelan EKISDÉ.
Cuando vas por los pasillos de mi instituto vas algo como cohibida. Sientes miles de ojos clavados en la nuca y oyes el fugaz fogonazo de las pistolas mientras te limitas a llegar a la biblioteca.
La religión esta exenta. El último profesor de religión que tuve, allá en el siglo XIX nos daba piruletas en los exámenes para que estuviésemos callados.
Sí, ese es el metodo mas eficaz de callar una jauría de hormonas.
Hormonas, otro tema importante en mi centro.
QUE NOS HABLEN DE SEXO, QUE NOS HABLEN DE DROGAS!
Que horror, todas esas charlas sobre sexo seguro, sobre alimentación y sobre drogas, y cuando vas paseando por los pasillos solo ves gordos, drogados y niñas embarazadas.
Luego también habría que hacer hincapié en la moda urbana. (En eso soy toda una experta, yo importé el comercio de las Vans en mi instituto)
Esa moda de las botas a lo Chiwaka , del pelo engominado terso hacia atrás y de el eye-line uniendo lacrimal con sien hace que me emocione y se me erice la piel, qué pasa, soy toda una sensible.

Pues nada con todo el traqueteo de esta gente, llegaban las 9 y media y yo me aproximaba al S.U.M (salón usos múltiples) donde se iba a hacer el examen.
Imaginaos la gente que iba al lado mía.. Subnormales con 7 suspensas, el que mejor.

El profesor (qué decir de él, el hombre más grande del mundo. Sus clases son todo risas) entrega el examen, y podemos comprobar, que sí que iba a ser unas horas a lo grande. Con el enunciado de ‘La empresa “Esta vez Sí que aprobaré S.L” ..’ comenzaba mi examen.

Gente con libros delante, la chica que parece que le falta medio cerebro preguntándome fórmulas a voz de grito, el profesor preguntándome desde 20 metros que si yo sentía que era justo que estuviese en la recuperación…
Una serie de cosas sin sentido que solo podrían darse en mi instituto, dónde si no.
Ah y como no hablar de los ordenadores carentes de ordenador, con S.O Windows 98 y Guadalinex (algo así como Linux, pero de la Junta de Andalucía… Ya lo he dicho todo verdad?)
En estos ordenadores he llegado a encontrarme carpetas con el nombre “ EXÁMENES DE SEGUNDO. PRIVADO” cuyo contenido me ha desembolsado unos cuantos duros, que amortizan toda la comida que compro a lo largo del día.
También cosas tan singulares como en el buscador de Google lo siguiente:
-Tía desnuda
-Teta
-Chocho
-Tia con chocho
Etecé..

En fin, que pasar unos simples minutos en mi Instituto, en el fondo merece la pena.


Corto Y Cambio


2 comentarios:

Anna dijo...

GUADALINEX? ME ESTÁS VACILANDO??? xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD jodidos andaluces

Laurra dijo...

te lo juro por mi estampa xDDDDDDDDDDDDDDDD